MEMORIAS DEL ÚLTIMO ESPAÑOL DE ESPAÑA: 6

¿Necesitaba, Federico que le invadiera su privacidad? O ¿necesitaba Federico seguir aislado y solo consigo mismo? ¿Pero quiénes eran, los que estaban invadiendo su mundo, sus sueños? Una voz le dijo que eran los lectores, a los que les había preguntado antes como resolver o reglar el mundo novelado…….

Esa voz le dijo que se llamaba Participa, pero que le gustaría que le llamase Participación y le dijo también, que estaba harta de Política y que lo realmente importante sería evacuar a Ideología del mundo de los sueños y traspasarla al mundo real y desterrar a Política del mundo real, porque así ya nadie más le llamaría Participado, ya nadie más le faltaría el respeto y sería libre. Paradójicamente Ideología le dijo que la libertad no existía, que lo que existía era la ignorancia y dentro de ella, según las circunstancias,  la facultad de elegir entre varias alternativas, en cuanto no se sabía cuál era la correcta; de modo que cuando se sabía cuál era la elección optima, se dejaba de ser libre, LA DECISIÓN nos venía dada, nos venía determinada. Pero por eso mismo el destierro de Política y el advenimiento de ella (Ideología), era el triunfo de la razón personificada en conducta. Era un hito histórico: nuestra conducta se racionalizaba al tiempo, que era un modo de desconectarse de la barbarie, de la historia de la humanidad y adentrarse en una nueva revolución neolítica o industrial y que conllevaba la mutación de la raza humana. Entender qué, de la raza humana brotaría una nueva raza mutante que acabaría con los no mutados, con los no adaptados al mundo entrante donde el real y el ideal se confundían por ser uno al tiempo que ese uno era multidiverso o multiuno. De pronto alguien dijo: ¿porque no puede ser multiadverso?

El autor apreciaba que ya no escribía, sino que le estaban escribiendo el guión y con la embriaguez, tampoco sabía si eran los personajes o los lectores. Por ello y nunca mejor dicho por “ello” le pregunto a Federico como se llamaba el autor.

Una voz lejana, era Política,  hablaba de los trastornos de personalidad y de la confusión que reina en las mentes perturbadas  al confundir los mundos y que se podía definir como “el submundo”

Ladran querido Sancho, luego cabalgamos dijo el loco de la colina  en su submundo refiriéndose a los prostituyentes de la comedia política, cuya visión adelantada de los acontecimientos, les llevaba a cocinar resultados electorales en el nombre de unas siglas que escondían a Tomas de Lampedusa  y su “Il gatopardo”; para que todo cambiará, para que todo siguiese igual; más de lo mismo, solo con la diferencia de formato y contexto, de modo que el tiempo diera vueltas en redondo.

Federico trastornado al llevar mucho tiempo sin poder dormir, sin poder conciliar el sueño, ya no sabía si a causa del cansancio o de la confluencia de los mundos, el caso era, que no quería ahora seguir escribiendo, ni siquiera sabía sí era él, el que escribía. Por otra parte, también estaba cansado para leer y entretanto empezó a ver como los náufragos se ahogaban pidiéndole socorro y él impassito asistía a tal holocausto. Ya nadie en la barca cuestionaba,  el dejar hacer a la naturaleza, era más, todos querían sobrevivir, ansiaban ver tierra firme y se preguntaban cuando la verían. Uno de los miembros se puso nervioso y empezó a decir que estábamos dando vueltas en redondo………. En ese momento comenzaron a verse más náufragos. Federico se pregunto ¿me quedaré ahora dormido? La negación de la negación nos conducía al retorno, al punto de partida. Otro náufrago le comento a Federico ¿tú decides? Los puedes salvar, al menos inténtalo, pon voluntad.