LA TERCERA
VÍA: EL PROBLEMA CATALÁN, EL PROBLEMA ESPAÑOL Y ALBERT RIVERA.
Nadie debe
disponer unilateralmente de lo que comparte con otro. Debe ser una negociación
bilateral; ahora bien, como poder, poder,………… puede disponer unilateralmente,
según sea el caso. Esto que digo acontece en matrimonios cuando se rompen o en
estados o partes de un estado.
Si tu estas
unido a un proyecto consolidado de vida en común por siglos y siglos de
convivencia, superando el milenio, el proyecto de separarte, cuando tu otra
mitad dice no a la separación, no tiene ni pies ni cabeza, carece de sentido
común histórico y es lo que hoy acontece en Cataluña.
Si tu estas
unido a mí por siglos y siglos de vida en común, valga la redundancia, si tu
estas encadenado a mí; tú (separatista) si quieres tirarte por el precipicio,
lo podrás hacer; pero resulta que al estar encadenados (tu y yo, desde hace
milenios) me tiras a mí también y yo no te voy a dejar, pero es más, tu otra
mitad, de ti mismo (el 52%, que voto unionista), te dice que no se quiere ir al
precipicio. TE QUEDO CLARO.
Pero es que
además la razón histórica, los siglos de los siglos unidos, dice no a la
separación y la moda, por otra parte, pasajera de unas elecciones plebiscitarias,
que has perdido (52% voto unionista), no puede disolver, lo que está
indisolublemente unido por la razón histórica: por los siglos de los siglos.
España, si
se quiere así decirlo, es una comunidad
de tribus territoriales unidas por un común destino, que dado “el ahora
presente”, se tiene que reinventar. Tal vez tengamos ineludiblemente que hacer,
una operación acordeón, de desintegración controlada (desconstrucción) para
reconstruirnos, con más fuerza, con más solidez. Tal vez España, como proyecto
de vida común ha fracasado por su asimetría de las tribus que viven y conviven
en el solar ibérico, tenga que morir, para resurgir de sus cenizas: IBERIA, como
proyecto de vida común simétrico donde el individuo y no el territorio, es el
sujeto de derecho. Un proyecto conducido por una fuerza política con carácter
integrador y estadista y no partidista, dotada de los atributos que manifestaba Ortega y Gasset
en su célebre discurso de “un aldabonazo”, que nacionalice el Estado de los
intereses particulares, que lo tienen secuestrado y que detalla Garicano en
Propuestas Económicas, 5 parte. Un Estado integral. Esa fuerza política heredera históricamente y
moralmente de la Agrupación al servicio de la República, tiene un nombre y se llama Ciudadanos y su líder es Albert
Rivera destinado a ser el conductor de reinventar España como concepto y
espacio donde caben todos y no sobra nadie, con el derecho a sentirse lo que
quieran (catalán, español,…….), por el mero hecho de ser sujeto de hecho y
derecho, por el mero hecho de ser Ciudadano y no patriota catalán, patriota
español……
Necesitamos
generar e posibilitar puertas de entradas para un espacio común, ya que y como
dijera Ortega, (en Crisol, 9 septiembre de 1931).
………..no es
cuestión de derecha ni de izquierda, la autenticidad de nuestra República,
porque es el caso de España………………no acepta ni absoluto vencedor ni absoluto
vencido……………………………………………Las Cortes constituyentes deben ir sin vacilación a una
reforma, pero sin radicalismo…esto es, sin violencia y arbitrariedad
partidista………………………la república es una cosa. El radicalismo es otra sino, al
tiempo.
Por la
España que no pudo ser y ahora sí: tercera vía.
Notad que
nuestra vida ahora consiste en repetir una vez más lo que veníamos haciendo
ayer o anteayer, que nos vamos cómodamente embarcados en usos antiguos, sino
que, por el contrario, queramos o no, estamos iniciando nuevas formas y modos
de vida pública, nuevas normas y propósitos y hasta vocabulario de
convivencia………………………………………………………………………………………los problemas que encuentra ante sí
hoy el Estado son de tal gravedad y profundidad, que ningún pretérito puede
servir de norma para atacarlos. La sustancia misma del hombre medio se ha hecho
tan distinta de lo tradicional, que nos obliga, ni más ni menos, como si dijéramos,
a brincar de una época a otra, a abandonar todo el mundo político conocido e
ingresar medrosos, atemorizados, en un mundo completamente nuevo y totalmente
incógnito. ……………………………..Pus bien señores: la república significa nada menos que la posibilidad de
nacionalizar el Poder público, de fundirlo con la nación, de que nuestro pueblo
vague libremente su destino, de dejarlo fare da se, que se organice a su
gusto;
Ortega y Gasset en diario “El
Sol” a 8 de noviembre de 1931.
Francisco Anaya
Berrocal en Málaga a 16 de octubre de
2015.