¿ES ESTO DEMOCRACIA?
¿ES ESTO
DEMOCRACIA?
Así iban en un yate
de recreo un grupo de europeos de crucero por el mediterráneo y
vieron una patera con inmigrantes a bordo y los recogieron; entonces
decidieron llevarlos a puerto, pero se encontraron otra patera y los
recogieron también y luego otra y otra después y entonces el
capitán del yate les advirtió, que si recogían a más, el yate se
hundiría. Fue decir eso y apareció otra patera con niños, madres
embarazadas ……………. y entonces su corazón contrariaba a su
razón y decidieron someter a votación si recogían mas emigrantes
o no, y salio elegido uno de los cruceristas, partidista de la
recogida, pero que carecía de conocimientos de náutica . El capitán
del yate espeto, si sometían también a votación el pilotaje de la
nave, por eso de ser más democráticos. El capitán del yate lo era
por cualificación y licencia que tenía para pilotar ; sin embargo
eran los turistas o pasajeros, los que decidían el futuro de la
navegación con su decisión de recoger mas o menos emigrantes. La
democracia se imponía al conocimiento. La Democracia regala el voto,
el Conocimiento se adquiere con esfuerzo y no es democrático; la
verdad no se vota, es certeza y por tanto no es democrática.
Cuando las
decisiones colectivas se dejan al arbitrio de comunidades de votantes
que carecen de los elementos de juicio necesarios y suficientes para
razonar y fundamentar el sentido de su voto en cuanto carecen no
solo de los datos sino también de las herramientas para procesar
esos datos y los valores que informan la decisión de su voto no
están auspiciados por el interés general, sino por intereses
egoístas, privados e espurios y en último término manipulados,
estamos dejando nuestro futuro en manos de irresponsables, no solo
por falta de conocimiento, sino también por falta de moralidad.
En este escenario
dominado por el relativismo, donde los límites del bien y del mal se
funden y se confunden y las reglas del hacer social habilitan la
demagogia que sustenta este modo de vida corrupto, hace necesario una
cuarentena democrática que regenere este mal que nos aflige.
El voto es un
derecho, que no obligación (al menos jurídica en España) y como
tal derecho hay que ganárselo y no regalarlo. Yo puedo decidir con
mi voto si circulamos por la derecha o si circulamos por la
izquierda, siempre y cuando estudie las consecuencias de tal
decisión, siempre y cuando conozca el proceso circulatorio , sepa lo
que es la circulación rodada y este dispuesto a cumplir y no
vulnerar la decisión adoptada. La pregunta es si yo y otros, no
podemos decidir quien lleva el avión de un sitio a otro sitio,
porque el resultado sería suicida, es eso, lo que hacemos con el
pilotaje de la nave del Estado, que la elegimos entre prescriptores
(partidos políticos), que nos llevan al suicidio colectivo.
Aprecien que la
falta de recursos propicia que enfermos en los hospitales fallezcan,
mientras las dotaciones presupuestarias de grupos municipales o
grupos parlamentarios no merman como debieran, posibilitando la
buena vida de la clase política y asimilados.
¿En ese orden cosas
tenemos derecho a rebelarnos contra el sistema? ¿O tal vez sea una
obligación?
La respuesta es sí
y lo es porque está política que es populismo, que emana de
escenario demagógico no es democracia y porque en último término
la política y su modalidad: Democracia es un medio para alcanzar la
verdad, no un fin.
Francisco Anaya
Berrocal en Málaga a 29 de junio de 2018.