viernes, 29 de junio de 2018

¿ES ESTO DEMOCRACIA?


¿ES ESTO DEMOCRACIA?

Así iban en un yate de recreo un grupo de europeos de crucero por el mediterráneo y vieron una patera con inmigrantes a bordo y los recogieron; entonces decidieron llevarlos a puerto, pero se encontraron otra patera y los recogieron también y luego otra y otra después y entonces el capitán del yate les advirtió, que si recogían a más, el yate se hundiría. Fue decir eso y apareció otra patera con niños, madres embarazadas ……………. y entonces su corazón contrariaba a su razón y decidieron someter a votación si recogían mas emigrantes o no, y salio elegido uno de los cruceristas, partidista de la recogida, pero que carecía de conocimientos de náutica . El capitán del yate espeto, si sometían también a votación el pilotaje de la nave, por eso de ser más democráticos. El capitán del yate lo era por cualificación y licencia que tenía para pilotar ; sin embargo eran los turistas o pasajeros, los que decidían el futuro de la navegación con su decisión de recoger mas o menos emigrantes. La democracia se imponía al conocimiento. La Democracia regala el voto, el Conocimiento se adquiere con esfuerzo y no es democrático; la verdad no se vota, es certeza y por tanto no es democrática.
Cuando las decisiones colectivas se dejan al arbitrio de comunidades de votantes que carecen de los elementos de juicio necesarios y suficientes para razonar y fundamentar el sentido de su voto en cuanto carecen no solo de los datos sino también de las herramientas para procesar esos datos y los valores que informan la decisión de su voto no están auspiciados por el interés general, sino por intereses egoístas, privados e espurios y en último término manipulados, estamos dejando nuestro futuro en manos de irresponsables, no solo por falta de conocimiento, sino también por falta de moralidad.
En este escenario dominado por el relativismo, donde los límites del bien y del mal se funden y se confunden y las reglas del hacer social habilitan la demagogia que sustenta este modo de vida corrupto, hace necesario una cuarentena democrática que regenere este mal que nos aflige.
El voto es un derecho, que no obligación (al menos jurídica en España) y como tal derecho hay que ganárselo y no regalarlo. Yo puedo decidir con mi voto si circulamos por la derecha o si circulamos por la izquierda, siempre y cuando estudie las consecuencias de tal decisión, siempre y cuando conozca el proceso circulatorio , sepa lo que es la circulación rodada y este dispuesto a cumplir y no vulnerar la decisión adoptada. La pregunta es si yo y otros, no podemos decidir quien lleva el avión de un sitio a otro sitio, porque el resultado sería suicida, es eso, lo que hacemos con el pilotaje de la nave del Estado, que la elegimos entre prescriptores (partidos políticos), que nos llevan al suicidio colectivo.
Aprecien que la falta de recursos propicia que enfermos en los hospitales fallezcan, mientras las dotaciones presupuestarias de grupos municipales o grupos parlamentarios no merman como debieran, posibilitando la buena vida de la clase política y asimilados.
¿En ese orden cosas tenemos derecho a rebelarnos contra el sistema? ¿O tal vez sea una obligación?
La respuesta es sí y lo es porque está política que es populismo, que emana de escenario demagógico no es democracia y porque en último término la política y su modalidad: Democracia es un medio para alcanzar la verdad, no un fin.





Francisco Anaya Berrocal en Málaga a 29 de junio de 2018.

domingo, 24 de junio de 2018

EUROPA EN LA ENCRUCIJADA: Las invasiones .


EUROPA EN LA ENCRUCIJADA: Las invasiones .


El problema de Europa es su desarme moral, que le impide defender su propia existencia y construir un proyecto de futuro común y compartido por valores propiamente europeos como la pluralidad, la tolerancia, la creatividad que son esenciales para el avance de las ciencias y las artes. El respeto a la pluralidad y la diversidad ha de tener límites y que no son otros que la intolerancia a los que no respetan la tolerancia y la capacidad de elección.
Roma cayo y con ella, su imperio, su modo de vida, por la quiebra de su sistema fiscal que posibilito las invasiones barbaras, que eran invasiones de pueblos y no de ejércitos. Los bárbaros querían la ciudadanía romana, como antes la quisieron otros pueblos o sea un modo de vivir mejor con arreglo a los tiempos aquellos.
Si sustituimos Roma por Occidente y el Mare Nostrum por el océano Atlántico apreciaremos los mismos síntomas: quiebra del estado del bienestar por quiebra fiscal y llegada de inmigrantes en oleadas sucesivas, que quieren vivir como occidentales, ya sea cruzando rio Grande o el estrecho de Gibraltar.
El desarme moral para defender nuestro modo de vida procede de una falsa tolerancia o tolerancia mal entendida, que nos hace tolerar modos de vida incompatibles con el nuestro. Si toleras que tu sistema albergue modos de vida que cuando crecen y son fuertes pretenden destruir el sistema que les da cobijo, se produce el fin del sistema.
De la calle vendrán y de tu casa te echaran, dice un dicho nacional.
El problema no son solo los inmigrantes que llegan, sino los valores que traen, las pautas de
comportamiento social e individual, que no solo chocan con las establecidas aquí, sino la falta de voluntad de integrarse en las sociedades que las acoge y la reproducción de sus modos de vida en guetos, que nos hace tener islas psico sociales del tercer mundo en nuestro mundo.
Cuando un nigeriano después de mas de una década en España sigue llamando beans a las judías, cuando una marroquí se pone el velo en España ahora cuando años atrás no lo llevaba en Tánger o cuando un argelino sigue viendo normal que un hombre tenga cuatro esposas, pero una mujer no pueda tener cuatro maridos y cuando todo eso ocurre porque hay europeos que manifiestan que hay que respetar la diversidad cultural y asimilarla e integrarla, es que estamos desarmados culturalmente, porque no somos capaces de defender lo nuestro, porque no somos capaces de defender nuestros valores y por tanto condenados a extinguirnos como civilización.
Así iban en un yate de recreo un grupo de europeos de crucero por el mediterráneo y vieron una patera con inmigrantes a bordo y los recogieron; entonces decidieron llevarlos a puerto, pero se encontraron otra patera y los recogieron también y luego otra y otra después y entonces el capitán del yate les advirtió, que si recogían a más, el yate se hundiría. Fue decir eso y apareció otra patera con niños, madres embarazadas ……………. y entonces decidieron someter a votación si recogían mas..............…..…...….….............…......……..…..…...…….......….…….....……………………….











Francisco Anaya Berrocal en Málaga a 24 de junio de 2018.

domingo, 17 de junio de 2018

DEMOCRACIA 2 PARTE: ¿DEMOCRACIA O DEMAGOGIA?


DEMOCRACIA 2 PARTE: ¿DEMOCRACIA O DEMAGOGIA?
La gente vota en función de su interés particular y no en función del interés general; ni siquiera vota en función de lo que piensa o cree que es lo mejor para su comunidad, sino de lo que le conviene en términos privados y particulares.
El comportamiento social de la población es el de sujetos políticos pasivos solicitando “que me vas a dar por mi voto” y no un comportamiento social de sujetos políticos activos. Los vecinos no se plantean que puedo hacer por mi barrio, que puedo hacer por mi país; es mas ya ni siquiera hacen por su familia, en muchos casos.
Si los vecinos no dejan de ser votantes y se transforman en ciudadanos que es la célula básica de la democracia, está no será posible y tendremos Demagogia o democracia prostituida. La Democracia esta formada por ciudadanos y no por votantes.
De esta manera los votantes deciden que se hace con el dinero de los contribuyentes y la recaudación tributaria se des legitima generando conductas de fraude fiscal. Y eso es así, en cuanto que los ciudadanos están legitimados para decidir sobre bienes y servicios públicos, pero no así sobre bienes y servicios privados cuya competencia recae sobre los consumidores y usuarios.
La diferencia fundamental entre lo publico y lo privado está en que el uso y consumo público es abierto e inclusivo en tanto en cuanto el privado es restrictivo y excluyente. Así andar por la acera no excluye que otros lo hagan, en tanto tomarse una cerveza en la terraza de un bar que ocupa espacio público impide que otros lo hagan en ese momento. Lo público no tiene que invadir lo privado, ni lo privado invadir lo público; ambos tienen que colaborar y cooperar.
En ese escenario de demagogia y fraude fiscal emerge los partidos políticos como instrumentos de la expresión de la sociedad e intermediarios con el poder. Este sistema de partidos políticos y como expresión de la sociedad de la que emana tiene un comportamiento de interés particular y no general; buscan su provecho y el de sus huestes que lo conforman pastando en los campos de los presupuestos públicos.
Este interés particular que informa a los partidos políticos genera estructuras internas carentes de democracia interna con modos verticales de comunicación de “arriba a abajo”, donde el dios-caudillo Rivera, Iglesias…...son “el amado líder”, donde cualquier discrepancia es considerada como traición al pensamiento único del partido y no como una fuente de enriquecimiento para el partido. Los procesos democráticos se desarrollan “de abajo a arriba” y por otra parte, tiene que haber comunicación horizontal de militante a militante, sin el filtro de cargos orgánicos. Esta falta de democracia interna en los partidos políticos se exporta o migra , replicándose cuando ocupan y colonizan las Administraciones Públicas.
Los partidos políticos elaboran programas electorales para ganar elecciones y ocupar las poltronas del Estado, no para transformar la sociedad en un sentido conforme a su orientación ideológica; la ideología es un instrumento u cuento para alcanzar el poder, para asentarse en el poder.
Esto conlleva que el Estado este secuestrado por intereses particulares o privados y no este imbuido e informado por el interés general.
En esa dinámica, el sistema de partidos políticos adherido como una costra al aparato del Estado, lo devora y con ello se produce su agotamiento como formula política. El agotamiento del sistema político de partidos se visualiza en la repugnancia de cada vez más gente por la política y los políticos; a los políticos se perciben como clase política que devora recursos públicos vía despilfarro, duplicidades y corrupción. Al propio tiempo se desactiva una respuesta social que pueda regenerar el sistema. Se impone la tesis de Tomas de Lampedusa en “il gatopardo: no hay nada que hacer, otros vendrán para destituir y sustituir a los que están para hacer mas de lo mismo.
Al panorama descrito llaman Democracia y al que lo pretenda derribar de anti demócrata, por no emplear otros términos.
Lo cierto es que la Democracia no es un fin, sino un medio para llegar a la estación final: verdad, para educarnos políticamente en la verdad. (en franciscoanayaberrocal.blogspot.com, 21/02/2016: “Democracia”).

Francisco Anaya Berrocal, en Málaga a 17 de junio de 2018.


viernes, 1 de junio de 2018

El advenimiento de la III República.


El advenimiento de la III República.
¿Cómo ha conseguido convencer Pedro Sánchez a fuerzas tan dispares como PNV o Podemos y así vencer a Rajoy? ¿Cuál es el cordón umbilical que los une y los aglutina? ¿Cuál es su denominador común? Porque este denominador común: el  republicanismo, nos permite vislumbrar y prever un nuevo escenario político de convulsiones, que permitirá  intentar conseguir sus metas finales y que  consisten en romper España tal como la conocemos, tal como la identificamos.
En ese itinerario, derribado  el presidente del gobierno (Rajoy), el siguiente será el jefe del estado (Felipe VI), símbolo de la unidad de España, símbolo de la permanencia de España como proyecto histórico de los pueblos que viven y conviven en el solar ibérico.
El actual agotamiento de nuestro sistema político o mejor dicho sistema de partidos políticos visualizado por el asqueo por la política y los políticos, el agotamiento de la pervivencia de la asimetría  entre territorios,  por los que unos son privilegiados para quebranto de otros ( el voto de Baracaldo vale más que el voto de Antequera y encima paga menos tributos teniendo mayor renta per cápita),  el alcance y conocimiento de que,  los derechos se ganan y no se regalan y  de que los derechos,  los  tienen las personas y no los territorios……..etc. ,  hace y genera una atmosfera social que desactiva la defensa de nuestra comunidad milenaria y posibilite la creación o intento de creación de nuevas fronteras internas, de nuevas fronteras ibéricas.
Solo bajo el cebo de una España republicana es posible una moción de censura triunfadora y derribadora de Rajoy y porque este,  es el instrumento  para generar un escenario político donde conseguir las metas de separatistas y rupturistas, que confluyen en metodología, pero no en metas.
Si queremos seguir chillando gol cuando marque Iniesta, si queremos seguir siendo españoles, es necesario romper urgentemente esa coalición, visualizando urgentemente las contradicciones entre ellos en metas frente a la unidad de itinerario que tienen y sostienen para logro y alcance de sus objetivos.
No se trata de sentirte español, sino de seguir siendo español. No se trata de tener nacionalidad española, sino,  y repito,  ser español y eso, precisamente eso,  es incompatible con otras formas se sentirte (catalana, vasca…) y compartir un mismo espacio común. El ser vasco, catalán o andaluz son modalidades del ser español y no entidades diferentes del ser español para un españolista; evidentemente un nacionalista no lo percibe como modalidad, sino como entidad diferente y esto determina la imposibilidad de convivencia, que llegado al momento actual es de enfrentamiento abierto, en cuanto el itinerario del autonomismo está agotado.  No solamente está agotado, sino que las vías federal y confederal son recién nacidos muertos, en tanto en cuanto que la otra España no tolera ni aguanta más asimetrías.
Tal vez España deba morir, para que Iberia sumerja como proyecto de vida en común determinado e informado por la homogeneidad,  igualdad y simetría de todos y cuando digo todos son todos, los que habitan en Iberia. De las personas y no de los territorios.
Ser republicano  no implica ser antiespañol, de hecho yo lo soy, pero la defensa de la unidad y permanencia de un proyecto histórico y milenario implica hacer frente a esa coalición de separatistas y rupturistas que quieren barrer mi sentir español. Yo quiero de nuevo chillar el gol de España que nos vuelva a hacer campeones del mundo.
Por todo ello soy republicano, soy español y soy felipista, y lo soy porque mi sentir,  mi querer fuerte puede más que mi pensar y porque la “razón histórica” (Ortega) me hace chillar gol cuando marque de nuevo Iniesta.
Soy español.



Francisco Anaya Berrocal, en Málaga a 1 de junio de 2018.