EL FIN DEL DINERO DE PAPEL
Y DE LA SUPREMACÍA DEL DÓLAR.
Ahora
se visualiza con el cisne negro del coronavirus, lo que ya preexistía
y es que no habíamos salido de la crisis de las subprime cuando nos
hemos metido en el crack de 2020.
Las
causas que la provocaron siguen vigentes pero amplificadas
manifestándose en su plenitud.
La
falla estructural del sistema financiero está en la inversión o
vuelta al revés de las cosas.
1
la Bolsa como cualquier mercado de capitales tiene como función la
de abastecer de capitales al sector productivo de la economía y
desde el momento y hora que se desliga de esta función- que le es
natural y diseña e desarrolla productos financieros que adquieren
vida propia de los activos subyacentes de los que derivan y obtienen
ganancias mediante su comercio desligados de las ganancias de las
empresas productivas- el sistema comienza a fallar.
2
las compañías cotizadas cuando mejoran sus cotizaciones (que no
valoraciones1) no derivadas de su actividad económica
sino de su actividad financiera -como recompras de acciones para su
autocartera, repartos de dividendos desligados de sus beneficios,
adquisiciones de otras compañías con fondos de comercio inflados….-
vemos entonces como la estructura económica de la empresa se
divorcia de su estructura financiera.
3
los bancos centrales expandiendo la base monetaria desconectada del
volumen de ahorro y definiendo tipos de interés negativo que hacen
financiar a empresas y sectores no rentables (zombis) mantenidos
artificialmente por este crédito barato, casi cero.
4
una deuda pública que se costea también artificialmente amparándose
en estas tasas negativas de interés que desmayan al sentido común2
y una inversión de la curva de tipo de interés.
Podríamos
seguir señalando mas causas y que en último término nos expresan
la deficiente asignación de recursos que determinan la cronificación
de la crisis con la persistencia de la ingeniería financiera y la
aparición de nuevos actores en el sistema financiero que escapan al
control de las autoridades monetarias e financieras y que aceleran la
desintermediación y descentralización de los mercados.
El
dinero se hace oxidable y por tanto todo el mundo vende por falta de
liquidez, ya sea acciones, ya sea bonos del gobierno, ….hasta el
oro y las criptomonedas caen3; es como un agujero negro
que absorbe, todo el mundo necesita dinero para tener dólares. La
caída vertical de ingresos de las empresas y las familias por la
pandemia del coronavirus y el desempleo que conlleva, incrementa la
demanda de crédito dado que los gastos no se reducen en la misma
proporción que los ingresos y por otra, esta caída de ingresos
imposibilita el pago de deudas con lo que se incrementa la morosidad
bancaria, lo que afecta sobremanera a la industria bancaria que ya
asumía un elevado riesgo en el binomio rentabilidad-riesgo (a causa
de las tasas negativas de interés) y que hacen forzar nuevas
emisiones monetarias desligadas de su valor económico para socorro
de la industria bancaria4. Pero la receta de expansión
monetaria es como dar mas alcohol para aliviar la resaca, ya que es
una solución del pasado para un problema del presente (pandemia del
coronavirus)5 y las narrativas de antaño que explicaban
la realidad bursátil en particular y la realidad económica y
política en general no nos vale para explicar la realidad disruptiva
que vivimos, que requiere de respuestas nuevas para preguntas nuevas,
soluciones nuevas para nuevos problemas.
La
demolición del patrón confianza-dólar y de las monedas fiat está
en curso así como la
sustitución del dinero de papel por el dinero electrónico se
acelera a causa de la pandemia.
El
yuan cuestiona la supremacía del dólar sin tener capacidad de
sustituirlo, el rublo o el dinar se coaligan para dañar al dólar….en
esta guerra de divisas, de descentralización monetaria, el oro no
puede ser imprimido por ningún gobierno o banco central.
1-Francisco
de Quevedo: solo el necio confunde valor y precio
2-
imagínese que el casero le paga al inquilino por arrendarle el piso,
pues eso hace el prestamista privado con el prestatario público.
3-el
oro varia de precio, solamente en el muy corto plazo, ya que el oro
no cambia de valor. El precio del oro se define en dólares
diciéndonos lo que vale el dólar, no lo que vale el oro, ya que el
oro es anterior al dólar, el oro es el medidor de medidores.
4-
la caída del precio del petroleo por el menor consumo a causa del
COVID 19 origina que las cías extractoras por fracking y otras
caigan y no paguen sus deudas, lo que llevará a los acreedores
bancarios y no bancarios a deshacerse de bonos respaldados en dólares
para cubrir estos fallidos
5-el
coronavirus no es la causa de la crisis, sino un acelerador
Francisco
Anaya Berrocal en Málaga a 1 de mayo de 2020.